Todos nos hemos visto en la tesitura de tener que elegir una cámara digital y, generalmente, la decisión no resulta tan sencilla, dado que el conocimiento popular acerca de cómo es un buen sensor de cámara digital no es tan distendido como ocurre en otros productos de tecnología, tales como los ordenadores o los smartphones.
Esto es algo que la mayoría de los fabricantes han sabido capitalizar desde el nacimiento de las cámaras digitales, porque han logrado convencer a los clientes acerca de la rentabilidad de adquirir equipos evaluando ciertos aspectos fáciles de mejorar a bajo costo, pero que en el fondo no son tan relevantes en la calidad de las fotografías, como es el caso de los píxeles.
De hecho, todavía esta guerra sigue vigente y si observamos en cualquier tienda de cámaras, es muy probable que el número de megapíxeles aparezca en un tamaño superior al resto de las características.
¿Cómo funcionan los sensores de las cámaras?
Para tomar una correcta decisión es necesario analizar cómo funcionan los sensores de las cámaras, valorando las ventajas e inconvenientes de cada uno de los tipos y tamaños más relevantes en las cámaras de consumo.
Los sensores de las cámaras se dividen en tres tipos principales: los antiguos CCD poco comunes en la actualidad y solo presentes en algunas cámaras de bajo coste, los CMOS que originalmente eran inferiores en calidad a los CCD pero han evolucionado para superarlos y convertirse en un casi estándar; y los Foveon X3, basados en la tecnología CMOS y específicos de las cámaras Sigma como un signo distintivo de innovación tratando de aportar mejor rendimiento que sus antecesores.
Tipos de sensores por tamaño
Por otro lado vamos a comentar los tipos de sensores de cámaras digitales según su tamaño:
- Full Frame: Consiste en disponer de un sensor que sea capaz de captar la imagen completa que se recibe a través del diafragma. Lo que vemos por el visor es exactamente la imagen que captaremos con nuestro sensor. Se suelen encontrar en cámaras grandes profesionales y dependiendo de nuestro presupuesto, es posible que este sensor no tenga ningún sentido por su alto precio.
- Active Pixel Sensor (APS): Estos particularmente son los sensores más comunes en cámaras réflex de alta calidad ubicadas en un punto intermedio entre la gama consumo y profesional. Permiten tamaños de cámara mucho más reducidos y menos costosos que los Full Frame pero se pierde una parte del contenido que vemos por el visor. Una peculiaridad de este tipo es fueron los primeros en dar el paso a la tecnología CMOS casi en exclusiva.
- Cuatro Tercios: Se suelen usar en cámaras inferiores en calidad y precio porque hablamos de un factor 2x, es decir, una cuarta parte del tamaño del Full Frame.
¿Cómo es un buen sensor de cámara digital? Eligiendo la mejor opción
Si queremos una cámara digital de calidad a un presupuesto moderado, deberemos fijarnos en la gama CMOS/APS ya que no solo son los más comunes sino los que mejor rendimiento ofrecen. En cuanto al tamaño del sensor a elegir, la diferencia más destacable es que a mayor tamaño de sensor mayor tamaño de cámara y por tanto mayor peso. Por eso si nuestros “requisitos de calidad” son moderados, podemos optar por tamaños inferiores.
Como dato curioso, hoy en día la mayoría de los terminales móviles cuentan con sensores CMOS y tamaños por debajo de los cuatro tercios (entre 2x y 3x), con lo cual podemos ver que la elección del sensor no solo depende del presupuesto sino de la carga que estemos dispuestos a asumir.
Otros elementos a tener en cuenta: Los famosos píxeles
Existen otros aspectos interesantes a tener en cuenta a la hora de elegir una cámara digital, pero no fundamentales, para una buena fotografía, como son el caso de los famosos megapíxeles. En los inicios de la fotografía digital, cuando no se alcanzaba ni siquiera 1 Megapíxel, era fundamental mejorar este aspecto, por un principal motivo: para evitar una distorsión, el medio donde se fuera a mostrar dicha fotografía debería de tener menos resolución que la máxima permitida por el sensor.
Ya fuera en papel impresa, en un medio digital, como una pantalla de ordenador (como por ejemplo a través de una página web) o en un cartel de gran tamaño, la resolución de las primeras cámaras era muy limitada, esto forzó a incrementarla, originando dicha fama que encontramos actualmente.
Sin embargo, hoy en día, las mejores pantallas de consumo, las llamadas 4K solo requieren ocho megapíxeles, algo que casi cualquier cámara ya ofrece, por tanto, toda foto ejecutada por encima de esa resolución, no aportaría ventaja alguna de visionado. Solo se observan ventajas de adquirir un sensor con mayor resolución en medios profesionales, donde el plotter de impresión puede ser capaz de superar grandes cifras en cuanto a píxeles se refiere.