Con la cantidad de comentarios que habremos escuchado en nuestra vida sobre personas que utilizan la conexión de su vecino para tener Internet gratuito, es imposible que más de una vez no hayas querido saber si te están robando el Wifi de alguna forma. Y es que, aunque todo pueda parecer completamente seguro a conexiones externas, siguen existiendo métodos para acceder. Como suele decirse en estos casos: “el que hizo la ley, hizo la trampa”. Afortunadamente existen varios mecanismos que te permitirán saber si te roban el Internet y, quizá aún más importante, proteger el acceso a la conexión de Internet para evitar que esto ocurra en un futuro.
¿Cómo saber si te roban el Internet?
Si tomamos un poco de trasfondo, hemos de tener en cuenta que apenas hace una década acceder a Internet a través de una conexión ajena era “moco de pavo” para cualquier estudiante de informática, ya que varias técnicas permitían este acceso sin grandes impedimentos. Pero la tecnología ha avanzado significativamente y las barreras se han incrementado, haciendo esta labor muchísimo más difícil para el intruso.
Esto quiere decir que esta preocupación debería reducirse significativamente, ya que es muy improbable que en la actualidad sea necesario saber si te roban el Internet, dado que probablemente no haya nadie haciéndolo.
Sin embargo, si aun así tienes la sospecha, existen algunos mecanismos para saber si están accediendo por uno de los canales más comunes y abiertos que existen: la red inalámbrica WiFi.
¿Cómo saber si te están robando el WiFi?
Según nuestro nivel de conocimiento informático, podríamos subdividir el análisis del WiFi en tres niveles:
Nivel principiante
El mecanismo más sencillo es analizando las luces del Router. Hay que tener en cuenta que si contamos con decenas de dispositivos que se conectan a Internet, entre los que se incluyen Smartwatches y Smart TV, cualquiera de ellos podría estar estableciendo una conexión a Internet para descargar cualquier cosa en cualquier momento (como una actualización). Por ello es importante asegurarse de apagar completamente todos los dispositivos antes de ejecutar este método. Una vez hecho, simplemente miramos las luces y vemos si parpadean. En caso afirmativo, significará que hay una conexión a Internet activa.
Nivel intermedio
Lo correcto sería acceder a la configuración del Router y analizar las entradas relativas a conexiones activas. En todo Router hay un apartado que nos indica los dispositivos conectados con su dirección MAC (algo parecido a una matrícula identificativa del dispositivo). Si sabemos cuáles son los dispositivos conectados a nuestra red y localizamos en la carcasa o en la configuración sus direcciones MAC, podremos identificar si hay un dispositivo intruso en la lista.
Nivel profesional
Existen programas que permiten monitorizar el tráfico que pasa por nuestro Router. Podríamos no solo saber si hay conexiones intrusas, sino identificar qué clase de servicios están utilizando e, incluso, jugarles una mala pasada. También hay que recordar que esto es recíproco: el intruso podría jugarnos una mala pasada también si accede a nuestra red, por tanto hemos de ser precavidos, ya no solo por cuestiones de rendimiento sino también por problemas de seguridad.
¿Cómo proteger el acceso a la conexión a Internet?
Como decíamos anteriormente, las conexiones suelen estar bastante fortificadas y es muy raro que se necesiten medidas adicionales para protegernos. Si aun así queremos reforzar un poco más, existen un par de opciones que se realizan desde el Router:
- La más sencilla es incrementar la dificultad de la contraseña de acceso Wifi. Cuanto más larga sea, más números y letras posea, más difícil será de romper. Es posible escribir varias decenas de caracteres, por lo que la longitud de la misma puede ser directamente proporcional al miedo que tengamos de que alguien entre.
- Otra solución relativamente popular consiste en poner un identificador Wifi extraño o incluso desactivar el identificador visible al público. Por lo general, los intrusos tienden a centrarse en los identificadores clásicos (los que pone el proveedor de telefonía que suelen empezar por “WLAN_”). Por tanto, con esta acción reduciremos las posibilidades de un ataque.