Los ordenadores y la informática han sufrido un avance bestial en los últimos tiempos. Aunque es un campo tecnológico relativamente nuevo, en la última década las tarjetas gráficas, placas base, procesadores y componentes en general que conforman un ordenador han recibido una ingente cantidad de mejoras. Desde dispositivos más pequeños con una potencia abrumadora (como los smartphone) hasta auténticos ordenadores condensados en tarjetas gráficas, capaces de llevarnos a la siguiente generación gráfica dentro de los videojuegos.
Otro de los campos que se ha mejorado sensiblemente es la transmisión de información dentro de un ordenador. Los discos duros convencionales han sido superados en términos de velocidad por los SSD, unos discos duros que cuentan con una tecnología que graba y lee la información a gran velocidad. De esta forma, el sistema operativo y los programas funcionan mucho más rápido y mucho mejor. Su principal inconveniente es su precio, pues los discos duros convencionales siguen siendo mucho más baratos que los SSD.
La otra característica que ha sufrido grandes cambios son los USB. La primera tecnología USB tenía una velocidad bastante lenta, y con cada actualización, la velocidad de transmisión y lectura se ha mejorado sustancialmente. Actualmente estamos con los USB 3.0, existiendo ya la tecnología USB 3.1. Muchos os estaréis preguntando ¿en qué me afecta el tipo de USB y cuál debo elegir? En Geekno, os contamos qué factores a tener en cuenta para elegir vuestros USB.
Guía básica para elegir el USB adecuado
¿Vas a comprar un nuevo USB? Te contamos en qué debes fijarte para elegir uno.
¿Para qué quieres el USB en cuestión?
Si lo que estás buscando es una memoria USB o un disco duro portátil, entonces te recomiendo encarecidamente que busques lo que busques, tenga USB 3.0. A la hora de tener un dispositivo de este tipo, es realmente importante que la velocidad de lectura y escritura sea lo más alta posible. Si tienes un USB 3.0, ahorrarás mucho tiempo en copiar los archivos, además de ejecutarse bastante mejor.
Si lo que quieres es un cable USB para cargar el teléfono, entonces busca un cable USB de carga rápida. Puedes encontrarle en portales como Amazon o en tiendas de electrónica, y supondrán una gran diferencia a la hora de cargar tu móvil (sobre todo si valoras tu tiempo).
Intenta huir de adaptadores y demás
Es bastante posible que por algún error o por intentar no comprar muchos cables te hayas planteado hacerte con algún adaptador. Uno de los grandes problemas que existen en la informática actual es la cantidad casi indecente de cables que necesitamos. Un cable para los discos duros, otro para conectar nuestros mandos con nuestro ordenador, otro para cargar el teléfono móvil…
Pues tengo malas noticias para ti. El uso de adaptadores suele castigar mucho la velocidad de los USB. Si puedes evitarlo, compra un cable independiente. Notarás la diferencia.
Además del cable, también necesitas un puerto
Vale, has leído los dos consejos anteriores, y has decidido comprarte un USB 3.0 para estar a tope de gama. Sin embargo, no notas la diferencia de este cable con tu anterior cable USB. La respuesta es simple: de nada te sirve hacerte con un cable USB 3.1 si el puerto de tu ordenador es un 2.0. Antes de comprar cualquier cosa e invertir un dinero, asegúrate de comprobar que tu ordenador o dispositivo la soporta. Para ello, echa un vistazo al manual de instrucciones del ordenador o teléfono móvil en cuestión.
En la gran mayoría de ocasiones, los ordenadores tienen varios tipos de USB. Si en un puerto no notas la diferencia de velocidad, prueba a cambiar de puerto.