Cuando un estudio se embarca en el desarrollo de un videojuego empieza una aventura que no se sabe cuándo acabará. Algunas veces, se trata de una travesía tranquila, que llega a puerto sin problemas, pero otras veces, no se llega a destino, se acaba en naufragio o dando miles de vueltas hasta llegar al final.
Con esta metáfora, queremos explicarte que el diseño de videojuegos es un camino arduo en el que se pueden presentar dificultades que son un obstáculo de cara a ß. Pero, ¿cuáles son estas dificultades a las que se enfrentan los estudios de desarrollo de videojuegos?
Dificultades en el diseño de videojuegos
Estas son algunas de las dificultades que los estudios de desarrollo y diseño de videojuegos se encuentran en el camino:
Pretender tener todas las respuestas (incluso antes de tener las preguntas)
El desarrollo de videojuegos se aprende en la práctica, equivocándose y encontrando las soluciones a los problemas que vayan surgiendo. Como todo en la vida, no se nace sabiendo crear un videojuego y tampoco, existe un manual para ello ni para las situaciones que se presenten. Cada proyecto es diferente y, por tanto, en cada uno de ellos, surgirán retos distintos.
No atender los aspectos críticos: gameplay, gráficos y código
Otro de los motivos por el que los estudios de desarrollo de videojuegos tienen dificultades es porque no prestan especial atención ni consideran alguno de los tres aspectos críticos a la hora de desarrollar un videojuego: mecánica del juego (gameplay), gráficos y código.
- Se debe procurar que no existen errores de diseño en la mecánica del juego (y sus reglas y desafíos). Además, es importante que en los tutoriales se explique bien el gameplay. Canto más simple y visual sea la explicación, mejor para los jugadores;
- Es muy importante que los estudios trabajen en los gráficos del videojuego y en ofrecer a los usuarios lo que están esperando;
- Si hay una cosa que molesta mucho a los jugadores es que el juego se cuelgue, tenga bugs o se tenga que descargar contenido para que se ejecute. En este sentido, es muy importante que el código, esté bien implementado por dentro y que no se vea por fuera. Los jugadores solo quieren jugar. No entienden ni quieren saber nada de códigos de programación.
Enfocarse en agregar muchas características a un juego
Un error muy común que se comete al desarrollar un videojuego es no enfocarse en el núcleo principal del juego y por ende, dejarse llevar por el deseo de agregar características que quitan tiempo, se convierten en un quebradero de cabeza para los desarrolladores y retrasan el lanzamiento del juego.
Trabajar sin una planificación previa
Los estudios de desarrollo de videojuego profesionales trabajan bajo una planificación que han creado previamente, ya que se ha de estudiar una serie de parámetros que tendrán en cuenta la viabilidad y el éxito futuro del videojuego en el mercado y en el público al que va dirigido.
Para esto se ha de desarrollar un plan de trabajo. En éste se debe definir y documentar todos los aspectos del videojuego. La planificación es lo que permite determinar herramientas de trabajo, el tiempo necesario, el presupuesto y visualizar todas las fases del proceso entre otros aspectos importantes.
No respetar la planificación
Igual de importante es trabajar bajo una planificación como respetarla. Si se deja de lado el plan de trabajo, es posible que lleguen los retrasos y el equipo de trabajo pierda motivación. No respetar la planificación no significa no realizar cambios sobre la marcha, sino postergar la realización de tareas que incumplen los plazos de tiempo fijados. Cuando se empieza un proyecto de esta envergadura, sobre todo, al principio, es posible que se haya planificado erróneamente, pudiendo no coincidir con la realidad. En este caso, se deben ajustar los planes de trabajo.
Empezar otro proyecto, dejando de lado el proyecto en curso
Es muy común que los estudios de desarrollo trabajen en varios videojuegos a la vez. La prueba de fuego a la que se deben someter es cumplir con todos ellos. No es profesional ni da buena imagen que un estudio sustituya o deje de lado un proyecto, sobre todo uno esperado por los usuarios, para embarcarse en uno totalmente nuevo. Además de no agradar a los jugadores, se habrá desperdiciado tiempo y recursos.
Lanzarse en un proyecto sin los recursos necesarios
Suele ocurrir que muchos estudios tienen buenas ideas, en ocasiones demasiado ambiciosas que requieren una gran cantidad de recursos para desarrollarlas. Muchos de ellos no cuentan con ellos y aún así, deciden embarcarse en el proyecto, llegando incluso a ocasionar su propia ruina.
Expertos en el sector explican que lo mejor es postergar el proyecto hasta conseguir los recursos que se necesitan. No se debe renunciar nunca a las buenas ideas, sino trabajar en ellas cuando se pueda. Muchos estudios de desarrollo piden financiamiento externo para poder crear sus videojuegos.
Abarcar más de lo que se puede desarrollar
Ya sea por desconocimiento de la magnitud del proyecto o por ambición personal de los estudios, muchas veces se suelen embarcar en proyectos muy ambiciosos. En este tipo de casos, lo mejor es simplificar todo lo que se pueda sin que el juego pierda su estilo. Aunque en algunas ocasiones, se debe reestructurar tanto que la mecánica del juego es muy diferente a la que se había pensado al principio.
Terminar repentinamente un videojuego
En ocasiones un proyecto puede resultar más difícil de lo que parecía y los estudios quieren terminarlo cuanto antes. Para ello, eliminan fases y características. Esto es un error de manual que no se debe cometer, ya que es imprescindible ser responsable con el proyecto y cuidar la calidad final del mismo, ya que si se acaba repentinamente y queda mal, ningún jugador tendrá interés en él y todo habrá sido una pérdida de tiempo y de recursos.
Es muy importante terminar todos los juegos que se empiecen, pero cuidando siempre la calidad de los mismos. Lo mejor es desarrollar videojuegos buenos y sencillos, que permiten a los estudios mejorar, continuar aprendiendo y desarrollando.