Si has adquirido el asistente inteligente Alexa, habrás quedado sorprendido por todas sus funcionalidades. Los dispositivos Amazon, sean Echo, Dot, Show o Spot pueden hacerte la vida más fácil y ejecutar ciertas tareas para proporcionarte tiempo y comodidad.
A pesar de todas estas ventajas, el altavoz inteligente de Amazon puede ser un arma de doble filo en lo que a la privacidad se refiere. Se han dado casos en los que el asistente ha grabado y compartido conversaciones personales de sus dueños sin su consentimiento. El beneficio de la tecnología es importante en nuestras vidas, sin embargo, la tecnología debe ser siempre controlada por los propietarios y nunca debe emplearse en su contra.
Para evitar sufrir cualquier tipo de invasión a la privacidad, existen ciertas medidas de seguridad que deben tomarse. Configurar la privacidad de Alexa y ejercer un control en sus funciones te permitirá disfrutar de sus ventajas sin ningún tipo de preocupación.
Mecanismo de funcionamiento: ¿a qué información tiene acceso Alexa?
Antes de comenzar a configurar la privacidad de Alexa, resulta de gran utilidad conocer que el asistente va a guardar grabaciones de aquello que le pidas en los servidores de Amazon. Por esta razón es importante saber cómo borrar las grabaciones de Alexa para evitar que la empresa las emplee en su propio beneficio.
Según Amazon. El dispositivo comenzará a grabar únicamente cuando se emplea la palabra de activación. Por defecto, esta palabra es “Alexa”, aunque se puede modificar a “Amazon” o “Echo” en función del dispositivo. Siempre que se pronuncie la palabra clave, el altavoz comenzará a grabar nuestra conversación para posteriormente enviarla a los servidores de Amazon. Un buen truco para saber cuándo está grabando el asistente de Amazon consiste en fijarse si se enciende una luz en tono azul, lo cual es indicativo que el dispositivo está escuchando.
Además de saber a qué información tiene acceso Alexa, es interesante conocer para qué se utilizan las grabaciones que recopila. Con estos datos Amazon puede recomendarte mayor contenido relacionado con tu cuenta, al tiempo que permite al asistente entrenar el reconocimiento de voz y mejorar su comprensión del lenguaje natural.
Formas de evitar riesgos de privacidad con Alexa
Para evitar sorpresas en lo que concierne a la privacidad y a la grabación de conversaciones sin consentimiento, existen ciertas medidas que se deben tomar con el objeto de minimizar riesgos de privacidad con Alexa.
Apagar el micrófono
La mayoría de los altavoces inteligentes presentan un botón físico destinado a la desactivación del micrófono. Si vas a tener conversaciones privadas es recomendable apagarlo previamente. Puedes quedar completamente seguro de que está apagado en el momento en que el botón se pone rojo.
Este es un buen mecanismo para ajustar la privacidad de Alexa. Sin embargo, recuerda volver a encender el micrófono el resto del día, ya que tampoco tiene sentido dejar a tu Amazon Echo inutilizado.
Limitar el micrófono y vigilar la cámara: mecanismos para ajustar la privacidad de Alexa
Dentro de la configuración de tu dispositivo puedes desactivar el acceso del micrófono a todas las aplicaciones, a excepción de las imprescindibles. Por otro lado, si la cámara supone un problema en ciertas situaciones, lo más sensato es girarla contra la pared para que no grabe nada.
Accede a tu cuenta para configurar la privacidad de Alexa
Una gran solución para proteger a tu Amazon Echo de los hackers es emplear una contraseña de red segura de al menos 20 caracteres con cifrado WPA2 PSK. Puedes disfrutar de las ventajas de tu altavoz inteligente siempre y cuando le des un uso responsable. Para ello, puedes proteger su función de orden de eco con un pin, comprobar comandos de terceros antes de la instalación y verificar cada cierto tiempo tus datos en el historial de búsqueda de aplicaciones.
De esta forma puedes sacar el máximo rendimiento de tu dispositivo con Alexa mientras consigues salvaguardar tu seguridad vigilando a qué información tiene acceso Alexa.