En una economía cada vez más globalizada, prácticamente ya no existe una industria que no escape a la necesidad de las innovaciones tecnológicas como punto fuerte para su supervivencia. Desde siempre, el universo de la ropa viene acompañando al ser humano en mayor o menor medida. Sin embargo, las propuestas de innovación han desacelerado con el paso de los años, mientras que en otras áreas industriales fueron incrementando, como es el caso de la arquitectura o la alimentación.
Además, las empresas de moda se enfrentan a una realidad ineludible: si no avanzas te copian. Asimismo, cuando otros hacen una copia, la hacen mejor por la sencilla razón de que no tienen los costes derivados del trabajo que implica llegar a un producto final, dado que ese producto les está siendo servido en bandeja. Este es el motivo por el cual ciertas industrias pretenden buscar mecanismos proteccionistas para evitar este tipo de ataques mercantiles sin necesidad de innovar y sin mucho éxito, pues no siempre es posible poner vallas al campo.
Precisamente una de las industrias que corre menos suerte en este ámbito es la textil, ya que las copias han alcanzado su máximo apogeo, sobre todo a causa del empuje de las economías emergentes que replican todo sistemáticamente. No obstante, con la ayuda de la tecnología se han logrado grandes avances en esta industria.
El avance a través de las innovaciones tecnológicas en el mundo de la ropa
Para no quedar atrás, las principales marcas ya han observado lo estrechamente ligado que está el diseño de ropa y tecnología en varios niveles.
No solo se encuentran ante la amenaza de la industria y la réplica, sino que también existen otros problemas derivados de la producción masiva, tales como el daño atmosférico por la acumulación de residuos y la importancia de marcar la tendencia de forma avanzada.
Para ello existen diversos mecanismos como las impresoras 3D en el diseño de ropa y la combinación multidisciplinar de varias áreas de negocio entorno al I+D, con el fin de conjugar una solución prácticamente imposible de replicar a bajo costo sin la fórmula secreta, como veremos a continuación.
Diseño de ropa y tecnología para resolver el problema con el medio ambiente
En primer lugar surge un gran dilema: ¿cómo es posible resolver esa enorme demanda de ropa que hace la constante y cambiante fuerza que mueve al mundo de la moda?
Millones de prendas acaban siendo desechadas o relegadas debido a las nuevas tendencias que cada año se acortan más: pasaron de tendencias anuales a tendencias semestrales. Ya algunas marcas como Zara, H&M y Mango empujan a sus consumidores incluso a la necesidad de las renovaciones mensuales.
Es aquí donde ha sido necesario que ciertos equipos de especialistas en compuestos químicos, maquinaria industrial y elementos tecnológicos vislumbren soluciones orientadas a reconstruir el ciclo de vida de las prendas, especialmente aquellas compuestas por materiales no biodegradables, en contraposición a aquellos movimientos que profesan el consumo de este tipo de materiales en exclusiva. La tecnología puede dar en los próximos años una solución definitiva en este aspecto.
Innovaciones tecnológicas para un mejor rendimiento
De la misma manera, también encontramos casos como el de Nike, cuya visión a futuro está en la aplicación de este tipo de innovaciones gracias a varios componentes que incorporarán en sus zapatillas con el objetivo de preservar un alto grado de exclusividad.
Por citar un ejemplo, el secreto industrial de las Nike Epic React Flyknit se encuentra en los materiales y en el diseño, lo que les confiere un elemento disruptivo tecnológico muy difícil de replicar.
El último eslabón: impresoras 3D en el diseño de ropa
Finalmente, no debemos olvidar cómo el nacimiento de la impresión 3D está revolucionando todos y cada uno de los mercados, por lo que no podía ser menos en el ámbito de la moda. Precisamente en la última Fashion Week de Madrid, dos diseñadoras subieron a la pasarela con diseños producidos en este formato de impresión, generando un gran impacto entre los asistentes.
Esto está llevando a que otros diseñadores como Iris van Herpen apuesten por la impresión 3D en los encuentros más destacables del mundo.