Podríamos decir que, actualmente, nuestro correo electrónico principal es casi como nuestro DNI. Utilizamos el correo para registrarnos en multitud de sitios, entre los que se incluyen servicios financieros como PayPal y también nuestros servicios comunes, como la conexión a Internet y la electricidad. También es posible, gracias a nuestro correo electrónico, ejecutar una compra on-line de cualquier tipo y, además, la mayoría de las grandes plataformas facilitan el uso de nuestras tarjetas de crédito al acceder a la cuenta. Por todas estas razones, pensar en proteger al máximo nuestra cuenta de correo electrónico es algo fundamental y, como Gmail es en la actualidad el proveedor número 1 de correo gratuito, saber si han hackeado la cuenta de Google es motivo de preocupación general.
Google implementa una enorme cantidad de sistemas para evitar que esto suceda, pero disponer de una cuenta de Google hackeada es totalmente posible, más considerando que, si compartimos contraseñas en diferentes sitios, se podrá acceder sin tantas dificultades a nuestra cuenta cuando se extraigan nuestros datos de otra página.
¿Cómo saber si han hackeado la cuenta de Google?
En primer lugar, vamos a identificar los elementos clásicos que nos permitirán detectar si la cuenta de Gmail está hackeada de alguna forma o si sigue siendo segura.
Afortunadamente, Google cuenta con sistemas avanzados de protección que nos permitirán conocer el estado de la cuenta en todo momento.
La potente revisión de seguridad
Para poder analizar si nuestra cuenta ha tenido actividad sospechosa, Google dispone de la llamada “Revisión de Seguridad” (Security Checkup). Esta nos ofrece cuatro aspectos fundamentales para detectar posibles puntos débiles en nuestra cuenta, e incluso nos informará si existe alguna actividad que deberíamos analizar con cautela.
En primer lugar tenemos, que analizar los dispositivos que usamos con nuestra cuenta. Es muy común poner nuestro usuario en diversos aparatos que vamos comprando e incluso en máquinas que hemos abandonado, regalado o vendido con el tiempo. En este apartado podremos saber qué dispositivos hacen uso de nuestra cuenta en el presente y también inhabilitar su uso futuro en caso de identificar un dispositivo que ya no está en nuestra posesión.
Identificando los accesos uno por uno
Por otro lado, Google rastrea todos los accesos que tiene nuestra cuenta y nos da datos suficientemente precisos de dónde la manejamos. Esto quiere decir que, si por ejemplo, Google nos señala actividad en otra ciudad diferente a la nuestra y nosotros nunca hemos estado allí (o al menos no en los últimos años), sabremos que nuestra cuenta está comprometida casi sin lugar a dudas.
Cómo evitar una cuenta de Google hackeada
En caso de que no hayamos identificado rastro alguno de actividad sospechosa, es importante evitar que pueda producirse en el futuro mediante ciertas herramientas de prevención que Google nos proporciona para mantener la seguridad de nuestros correos electrónicos.
Blindando nuestra cuenta
En primer lugar, lo más recomendable es reforzar la seguridad de nuestra cuenta en dos niveles:
- En primera instancia, lo correcto es que nuestro correo use una contraseña única con respecto al resto de los servicios. Aunque solo sea añadir un número más, una letra más, un símbolo o incluso cambiar una letra minúscula por mayúscula. Lo importante es que si nuestra cuenta queda comprometida en otra web, sea totalmente independiente de nuestro acceso al correo.
- En segundo nivel, lo más correcto es implementar la verificación en dos pasos. Esto garantiza que si alguien llega a acceder con nuestra contraseña, no pueda seguir avanzando dado que existe un segundo nivel de protección. El sistema simplemente nos manda un código al móvil por SMS o nos pide un código que podremos localizar en una aplicación especial que Google nos proporciona.
Limitar el acceso a terceros
Finalmente, por varias razones hay que tener cuidado con las páginas a las que otorgamos acceso a nuestra cuenta. La mayoría piden accesos muy básicos, como saber cuál es nuestra dirección, pero hay otras que incluso piden acceso a nuestros contactos u otra información delicada. En el centro de seguridad de Google podemos ver el listado de todas las empresas a las que les hemos otorgado permisos, identificar qué permisos hemos concedido e incluso retirarlos si ya no hacemos uso de la misma, una acción muy conveniente para evitar riesgos en la seguridad de nuestra cuenta.