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[Entrevista – 25M] El orgullo de formar parte de la comunidad friki
El día 25 de mayo es un día muy importante para todos aquellos que sentimos pasión por el mundo geek y las frikadas, es el día en el que, a parte de ser el aniversario del estreno de Una nueva esperanza, también se celebra el Día de la toalla, y es por ello que se instauró como el Día del orgullo friki. Un día en el que se realizan numerosas actividades en las que podemos mostrar nuestra pasión por Star Wars, El Señor de los Anillos, Juego de Tronos, Dragon Ball, Los Vengadores, League of Legends… y decir más orgullosos que nunca que: ¡Somos frikis!
Pero, desgraciadamente, no siempre ha sido así, los que pertenecemos al mundo friki sabemos que, aunque ahora se trata de algo aceptado, no siempre ha sido así. Hace unos 20 años no hubiéramos pensado que existirían bares frikis en los que jugar a videojuegos, tiendas en las que poder comprar merchandising de nuestras series y personajes favoritos o videojuegos que serían capaces de crear comunidades de jugadores enormes.
Es por ello que hemos querido hablar con Ainhoa Rubio, gerente y administradora de Oh My Game Bar Valencia; Beatriz Alvarez, directora y fundadora de La Frikilería y Maye Mac-Swiney, Marketing Manager de Riot Games. 3 mujeres, muy ligadas al mundo friki, para que nos cuenten su punto de vista desde su experiencia.
Para empezar, cuéntanos, ¿quién eres y a qué te dedicas?
Ainhoa:
Soy Ainhoa Rubio, Gerente y Administradora de OhMyGame Bar Valencia. Mi local forma parte de la 1ª franquicia española de e-sports bar cuya central se encuentra en Madrid.
Beatriz:
Me llamo Beatriz Alvarez, tengo 29 años y soy directora y fundadora de La Frikilería. Mi tienda nació como una pequeña tienda de provincias aquí en La Rioja, pero ahora enviamos miles y miles de pedidos cada mes a toda España y parte de Europa desde lafrikileria.com
Maye:
Me llamo Maye Mac-Swiney y trabajo como Marketing Manager en Riot Games.
¿Te consideras una persona friki? ¿Por qué? ¿Siempre ha sido así?
Ainhoa:
Si, soy friki y siempre orgullosa de ello… Un día empecé a jugar a Magic y a los meses formaba parte de una comunidad sana y divertida dentro de un MMORPG que me ha permitido viajar por toda España y conocer gente que aún a día de hoy sigue mi vida. No siempre fue así… para mi generación era raro y no estaba muy bien visto tener los gustos que tenía y menos siendo chica.
Beatriz:
Pues siempre me han dicho que soy un poco friki. Pero no sé por qué. Es cierto que desde pequeñita me ha gustado dibujar y enseguida me aficioné al cómic primero y al manga después. He colaborado en muchos fanzines y en cuanto me dejaron en casa empecé a acudir a ferias del manga… disfrazada de Totoro jajaja.
También en casa siempre hemos sido muy fans de los videojuegos y todavía hoy tengo todas mis consolas perfectamente operativas. Ah, y sigo jugando a rol todos los viernes con la misma gente que en el cole!! Bueno, también es cierto que tengo un bolso de Star Wars, uno de Tim Burton y otro de Zelda, pero eso es por que son muy monos. Y sí, me he leído todo Tolkien, todo Harry Potter, todos los de Hielo y Fuego, mucho de Lovecraft y llevo el pelo rosa como la Princesa Chicle, pero por lo demás yo me veo una persona muy normal, ¡oye!
Maye:
Creo que precisamente ahí está la cuestión: yo no me considero friki de nada. Para mí, mis pasiones -como la que tengo por los gadgets– son súper naturales y algo que forma parte de mi personalidad. Para mí es normal. Como para otra persona será normal tener pasión por coleccionar antigüedades.
¿Cómo definirías a la comunidad friki o geek?
Ainhoa:
Diversa, divertida, peculiar en muchos sentidos… No creo que se pueda generalizar cuando hablamos de friki o geek porque dentro de nuestra comunidad son muchas las formas de llevarlo.
Beatriz:
Pues diría que es demasiado heterogénea como para definirla como una comunidad. De lo que sí estoy segura es de que comparten algunas características que los hacen gente especial. Son gente generalmente culta, muy pacífica, son especialmente generosos y muy comprometidos con lo que les gusta.
Yo se lo digo siempre a los padres que vienen a buscar regalos para sus hijos que viven momentos de obsesión con Star Wars, Spider-man o Harry Potter:
Creo sinceramente que haber crecido leyendo el Señor de los Anillos o Harry Potter te aporta referentes personales con mejores valores que Cristiano Ronaldo. Y nadie llama friki a un niño que lleva el nombre de Ronaldo o Messi en una camiseta, pero probablemente si al que lleva la imagen de Aragorn.
Maye:
Los definiría como una comunidad de personas que siente una gran pasión por cierto tema, ya sea gaming, películas, deportes, moda, tecnología, etc.
¿Cómo crees que ha evolucionado la cultura friki en España en los últimos tiempos?
Ainhoa:
Creo que ha evolucionado a mejor… Cuando miro atrás y recuerdo leer a Tolkien, recomendárselo a todo el mundo, que nadie supiera de que hablaba y se metieran conmigo por soñar con elfos y dragones y vuelvo a mirar al día de hoy y veo todas las opciones que hay, cine, libros, juegos para todos los públicos… creo que estamos en una subida increíble y es apasionante vivirla.
Beatriz:
Pues yo creo que ha salido del armario, ¿no? Ahora nadie ve raro discutir delante de miles de personas en una red social sobre por qué los Stark son mejores que los Lannister (cosa equivocada, por cierto). O subir vídeos de sus últimas partidas en la Play o fotos con de su colección de Funko Pop. Al final somos animales sociales y nos agarramos a cualquier cosita que nos permita alimentar nuestro sentido de pertenencia a un grupo. Y a esto a los frikis no nos gana nadie jajaja 🙂 Tenemos una capacidad bárbara de sentirnos identificados con grupos a los que les gustan las cosas más insospechadas.
Maye:
Creo que siempre ha existido, pero con la democratización del Internet y el auge de las redes sociales, se ha hecho mucho más evidente.
¿Crees que se ha cambiado el concepto de ser “friki”? ¿Se ha eliminado el concepto negativo ligado a la palabra a nivel global?
Ainhoa:
Hubieron unos años aquí en España, no sé a nivel global, en los que el término friki se desprestigió mucho por la imagen que se le dio en la TV, no sé con qué interés, y nos vimos afectados de alguna manera. Pero sí, creo que la mayoría de la gente joven ahora tiene un puntito (o puntazo) friki y no se usa como algo despectivo ni lo tiene porque ocultar.
Beatriz:
Creo que no se ha eliminado la connotación negativa de la palabra. El concepto probablemente sí que está cambiando acercándose un poco más al fenómeno fan, pero todavía hay diferencias. A nadie le extraña que un niño de nueve años se haga cortar el pelo como Sergio Ramos o ver niñas de doce años desmayarse en un concierto de Justin Bieber. Lo justificamos diciendo que son fans. Pero si el niño en cuestión no sale de casa sin su varita de Harry Potter o se sabe de memoria hasta los planos de la Estrella de la Muerte, entonces no le diremos que es muy fan, sino que «es un poco friki el pobre».
Maye:
No creo que el ser friki sea algo negativo, al contrario, es la manera que tiene la gente de expresar lo que disfruta y lo que les apasiona. Quizás el concepto está menos estigmatizado porque cada vez más, la gente comparte intereses: por ejemplo, los fanáticos de Game of Thrones que se despiertan a las 3 de la mañana a ver el capítulo más nuevo o los fanáticos de Apple que nunca se pierden los anuncios de los nuevos productos.
Se podría decir que los negocios/empresas dedicados a la cultura friki todavía no son muy usuales, aunque la cosa está cambiando. ¿Qué es lo que más te gusta de tú trabajo?
Ainhoa:
El día a día, es un sueño dedicarse a algo que te gusta. Estoy en mi salsa, hablo de videojuegos, veo videojuegos, conozco gente nueva como yo a diario… creo que eso es… la gente que pasa por mi local es lo que más me gusta, trabajo por ellos y disfruto con ellos.
Beatriz:
Pues no estoy segura, fíjate. Ahora ves que se suben al carro de esta tendencia cadenas como Primark, Zara o el mismísimo Carrefour. Eso creo que «quema» un poco las marcas. Antes un pijama de Harry Potter era algo realmente original. Ahora en Primark los venden prácticamente al peso y por millares. Pero a la vez populariza el tema y hace que nuestro público sea más amplio.
De todos modos la competencia no es mala y te hace estar mejorando continuamente. Eso creo que es lo que más me gusta de este negocio, que estás obligada a buscar o inventar continuamente cosas nuevas.
Bueno eso, y que estás casi siempre tratando con gente contenta que está buscando un regalo o algo nuevo para su colección. Eso es muy chulo. Cuando alguien se toma la molestia de ponerte un comentario o escribirte para decirte que ha acertado con un regalo ¡es un subidón que no veas! O cosas como la del finde pasado, que vino una familia a mi tienda desde más de 500 km por que ¡¡era el regalo que una niña pidió para la comunión!! Supera eso Amazon jajaja 😉
Maye:
El ser testigo de esta pasión y saber que estoy contribuyendo a algo que es tan importante para tanta gente. Es increíble hablar con los jugadores, escuchar sus opiniones (buenas o malas) y el responder a este feedback en la medida de mis posibilidades.
¿Qué crees que se debería hacer para mejorar la comunidad friki o su concepto?
Ainhoa:
Creo que vamos por buen camino, lo único que creo que se podría y debería mejorar es la integración de las mujeres y chicas que día a día intentamos hacernos un hueco en este mundo y a las que no siempre se nos trata tan bien. Ingame y Offgame valemos mucho y podemos con todo igual que cualquier chico friki.
Beatriz:
Bufff, vaya pregunta. Desde que abrí la tienda tenía claro que quería que fuese un sitio donde pudiese entrar mi abuela y sentirse a gusto. Y eso ocurre muy frecuentemente. No solo viene la mía (que también, a ver si estoy comiendo bien…) sino que vienen muchas otras a comprar regalos de cosas que no saben ni pronunciar pero creen que nosotras lo tendremos.
Creo que esa es la clave para mejorar la percepción: ayudar a difundir esto, que no deja de ser otra cosa de cultura, y ponerlo fácil para que cualquiera pueda acceder y saber un poquito más.
Vale que mola sentirse especial y hablar de forma que solo los «iniciados» puedan entenderte. Pero explicarle a una abuela que no puede comprarle una sudadera de Gryffindor a su nieta, si ella es de Slytherin…¡eso mola mucho más! jajaja.
Maye:
Sinceramente no creo que haya que mejorar nada.
Ser friki no es malo.
Es tener pasión por algo y demostrarlo con orgullo. Mi recomendación sería que aceptemos que todos llevamos un friki dentro, que es una parte importantísima de nuestra personalidad y que demostremos lo felices que somos gracias a ello.
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